03/06:
Gracias por seguir este informe médico y psicológico de Don Ino. En las últimas semanas hemos visto algunos avances. La primera sorpresa llegó en la consulta del dentista. Si recuerdan, entró en coma a principios de febrero, justo después de regresar de una consulta dental, la primera de una larga lista recopilada por mi propia clínica. Desafortunadamente, por razones económicas, había decidido volver a su dentista habitual, que era mucho más económico al estar ubicado dentro de la facultad de medicina. Esta vez, gracias a sus donaciones, pudo continuar con su tratamiento dental esencial en mi dentista habitual. Decidimos primero eliminar todas las fuentes de infección, empezando por la extracción de una muela y una limpieza a fondo de toda la zona infectada. La muela estaba podrida, lo que explica por qué Ino no había sentido dolor en los últimos años. Debido a los numerosos medicamentos que toma y a las secuelas de su encefalitis, sigue siendo hipersensible al dolor y fue necesario administrarle una dosis de Epinefrina para poder anestesiar en profundidad toda la zona infectada sin afectar su cerebro. Tras hablar con el dentista y su neurologo, se confirma que una infección dental antigua sin tratar fue la causa de la disminución de sus defensas y la aparición de una infección por herpes. A esto se suman la posible infección por el virus Borellia, el estrés familiar, un golpe de cráneo contra la pared de la sala de ceremonias y otros factores que vamos descubriendo poco a poco. Tras este episodio en el dentista, comenzó a sentir dolor abdominal. Su médico de cabecera, el Dr. Germán Santos, le aplicó una técnica revolucionaria: un escáner portátil adherido al cráneo que puede detectar todos los puntos débiles, patologías actuales y futuras en su cuerpo, deformidades esqueléticas, cáncer en desarrollo, infecciones, etc. Así fue como descubrió la presencia de parásitos en numerosos órganos y la presencia de una hernia inguinal. Todo esto fue confirmado mediante análisis más específicos. Por lo tanto, debemos programar una cirugía, pero esta deberá ir precedida de una evaluación de riesgos por parte de un anestesiólogo. Los parásitos deben eliminarse o al menos reducirse, ya que su presencia puede afectar el sistema inmunitario y los niveles de ciertos elementos importantes como el magnesio, las vitaminas del complejo B, el hierro, las proteínas, etc., e incluso causar inflamación.
Paralelamente al tratamiento médico de las dolencias de Ino, decidimos que participara de nuevo en una ceremonia para que se beneficiara del enfoque chamánico de autocuración. La ceremonia tuvo lugar el último día de mayo en presencia de sus aprendices y un compañero chamán.
Tuve el honor de asistir a Don Ino con la banda sonora y la delicada tarea de refrescarle la memoria, ayudándole a redescubrir su estilo y gestos anteriores, pero sin impedirle expresar su nuevo enfoque, menos vocal, más gestual, totalmente intuitivo y genuino. Todos los participantes experimentaron una experiencia enriquecedora y especialmente emotiva. Su enfermedad no limitó en absoluto el alcance de la ceremonia. Don Ino, por su parte, pareció fluir con fluidez a través de los eventos emocionales, sin dejarse impresionar ni angustiar por ellos. Todo esto nos anima a retomar el ciclo de ceremonias bajo su dirección, pero con la presencia sistemática de un asistente.
Meses antes de su accidente cerebral, recibió un mensaje del abuela diciéndole que ya no necesitaba recibir la poción, y eso es lo que hará de ahora en adelante.

Se planean más sesiones con el dentista para las próximas semanas, así como con un neurólogo más joven y un logopeda especializado en lenguaje. También podría necesitar cirugía para su hernia...